Siete vehículos y 25 militares de Rabasa comienzan a vigilar en Elche «infraesctructuras críticas» y el cumplimiento del confinamiento
Siete vehículos del Mando de Operaciones Especiales (MOE) de Rabasa patrullaron ayer las calles de Elche en lo que es su primera intervención en la denominada «operación Balmis» tras decretarse el estado de alerta por la pandemia que ha desatado el Covid-19.
Una veintena de militares distribuidos en tres equipos básicos a los que se les encomendó la misión de comprobar si los ciudadanos cumplen las condiciones de confinamiento que establece el decreto. Para los casos en que esto no ocurra, los efectivos realizarán primero indicaciones a los infractores y, si fuera preciso, pondrán en conocimiento de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado aquellos incumplimentos que requieran su intervención para proceder a la imposición de sanciones y/o la detención.
Además, los «boinas verdes» se están encargando del reconocimiento de «infraestructuras críticas», como son el aeropuerto, las estaciones de Renfe, transformadores eléctricos...
Bajo la coordinación del Estado Mayor de la Defensa, a esta primera participación del MOE en la crisis por el coranovirus le seguirán otros cometidos cuyos objetivos y localizaciones se irán determinando según las necesidades que marque la situación que estamos viviendo, pero siempre asociados a zonas «con especial riesgo de contaminación».